lunes, 19 de octubre de 2009

MOISÉS Y LOS 72 NOMBRES DE DIOS



El Ser Humano a principio de la Creación, era como un explorador en un espacio en el que no exisita la vida. Y del mismo modo que los astronautas, antes de embarcarse, se llevan los viveres que han de permitirles subsistir durante el viaje, tambien el hombre tiene que recibir el alimento intelectual y emocional que ha de ayudarle a subsistir en su paso por la Tierra, el manjar espiritual que ha de permitirle entender lo que está haciendo y las leyes en que su trabajo puede apoyarse. Dicho de otra forma se necesita un manual de instrucciones de la máquina del Universo, de un mapa de carreteras, capaz de guiarnos en el viaje y ese mapa o manual lo contituyen los 72 Angeles de la Kabbalah.
Seguramente habrás oído acerca de la división del Mar Rojo, ¿verdad? Entonces conocerás el asombroso desenlace: justo antes de que la armada egipcia alcanzara a los Israelitas, el Mar Rojo se partió y los Israelitas pudieron huir hacia la libertad.¡Qué milagro! Pero es una leyenda antigua, ¿cierto? Falso. No sólo se partió el Mar Rojo, sino que se partirá de nuevo esta semana en nuestras vidas. La Kabbalah revela que no fue Dios quien partió el Mar Rojo. Fueron los Israelitas. Ellos llevaron a cabo esta increíble hazaña utilizando los poderes metafísicos de la Kabbalah (específicamente los 72 Nombres de Dios). Y lo que es más, antes de que las aguas se elevaran hacia el cielo, se nos explica que se requirió una acción física para activar el poder de los Nombres. Los Israelitas tuvieron que demostrar una total certeza en sus poderes divinos caminando físicamente hacia el mar con una completa convicción en un resultado positivo.
Naturalmente, cuando al principio se hallaban en la orilla del mar, viendo cómo el Faraón se aproximaba rápidamente, fueron poseídos por el miedo y la duda. Pero entonces Moisés les recordó los 72 Nombres. Ellos empezaron a meditar en éstos, utilizando todos sus poderes mentales para despertar una asombrosa fuerza espiritual. ¿Y sabes qué? Ni una sola molécula de agua se movió, al menos no hasta que los Israelitas conquistaron sus dudas y se metieron en el mar con total certeza. Ni una sola gota de agua se movió hasta que estuvieron metidos hasta el cuello en el mar. Entonces, cuando las aguas llegaron a su nariz, y todavía seguían manteniendo una total certeza, ¡zas!, las aguas se partieron, brindándoles el camino hacia la libertad. La lección espiritual está clara. Siempre que estamos a punto de alcanzar algo importante, de cruzar un umbral, el lado oscuro de nuestra naturaleza nos bombardea con miedo e incertidumbre. Solamente con una total certeza en nuestro poder podemos esperar dominar este lado de nuestra naturaleza. Utilizando las escencias de los Ángeles Kabalísticos podremos orientarnos hacia el centro de nuestro Ser y tener mucho más claro el panorama, los Ángeles actuan como disparadores en nuestra consciencia y siguiendo con certeza y Fé sus mensajes estaremos dando nuestros pasos con mucha más seguridad tanto sea a nivel físico, emocional o mental.

3 comentarios:

  1. Así sea.
    Que se cumpla para todos.
    Un abrazo.

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  2. Llegué para dejarte todo mi amor y respeto.. un abrazo


    pacobailacoach.blogspot.com

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  3. gracias,donde puedo estudiar aca en el peru?

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