Todo es hoy. Todo está presente. Todo está, todo es aquí. Pero también todo está en otra parte y en otro tiempo. Fuera de sí y pleno de sí…
Octavio Paz
Sus pequeñas manos
rugosas y blandas,
olían a orégano fresco.
Trenzaban cabellos,
tejían bufandas
y curaban empachos.
Entre otras penurias,
jamás se quejó por
mis mates lavados.
"La Bella Sufriente"
en tiempos lejanos,
donde (hacer click
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hubiera sido impensado.
Los años pasan volando,
siempre lo decía.
Se llamaba Matilde
era mi abuela,
y a veces la extraño.
A. Alba
Qué homenaje tan precioso y entrañable para ella. Esas manos... ¡Ay! qué bien las he imaginado con tus letras... cuánto, cuánto dicen...
ResponderEliminarUn abrazo muy grande, amiga :)
Qué poema tan tierno y dulce!!.
ResponderEliminarUn bello recuerdo.
Un beso.
Tanta ternura naquelas mãozinhas tão especiais! Jamais se esquece o sentir do toque, o carinho de uma carícia.
ResponderEliminarMãos sagradas, sempre presentes para nos ajudar! São assim as mãos da nossa avó, que jamais esqueceremos e que ainda hoje sentimos sua falta.
Tão belas as palavras que deixas aqui para a tua avó Matilde!...Gostei muito!
Un buen fin de semana
Abrazos!
A.S.
Que lindo homenaje realizas en esta entrada Adriana, a ese ser tan capaz de dar con sus afectos lo más edificante y hermoso y que tú recoges y nos muestras ahora en estos versos cargados de sensibilidad. Gracias por tan dulce hacer creativamente.
ResponderEliminarUn abrazo
Pues claro que la extrañaras amiga Adriana, una abuela es una segunda madre y muchas veces casi más que una madre.
ResponderEliminarEs un precioso homenaje con ese tierno y bello poema de amor, ¡me encanta!
Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
Es cálido y lleno de ternura. Me ha conmovido.
ResponderEliminarBesitos de anís.
Adriana, tu abuela Matilde habita en tu corazón...Como dice Octavio Paz, todo es aquí y todo es en otra parte.Vuelve como el orégano fresco a ocupar tus pensamientos, renovando tus recuerdos y sigue latente aquí y allí...Muy entrañable tu bello homenaje, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, amiga.
Feliz fin de semana con los tuyos.
¡Qué hermoso homenaje a tu abuela! Sin duda, ella está contigo. Un placer leerte. Te mando mi abrazo y cariño.
ResponderEliminarConmovedores versos, Adriana, para enaltecer a tu abuela y para confirmar pese al paso del tiempo tu inalterable sentimiento de amor y agradecimiento...
ResponderEliminarTe felicito por sentir así, amiga. Abrazo inmenso.
Jo...
ResponderEliminarQué suspiro, uffffffff
Es un poema de inmensa ternura.
Besos.
Adriana estoy segura que tu abuelita,
ResponderEliminarsiempre esta a tu lado cuidándote, tus
versos plenos de ternura y amor, me llegaron
al corazón mi amiga, gracias por escribir
tan hermoso.
Besitos dulces
Siby
Tierno homenaje a una gran mujer. Saludos amiga.
ResponderEliminarNo tuve la suerte de conocer a ninguna de mis abuelas, espero que mis nietas me recuerden con tanta poesía, amor y ternura y con algún olor especial, creo que mi caso sería lavanda...
ResponderEliminarHermoso, Adriana.
Un abrazo,
Que bellas y ciertas letras dedicas a la abuela. Son las personas más sabias aunque no tuvieran estudios, pero tenían la carrera de la vida y casi siempre menos favorable que la de ahora.
ResponderEliminarComo siempre Adriana, un gusto leer tus poemas tan hermosos.
Un abrazo y buen domingo.
Bello homenaje del que me llega la brisa de ese orégano fresco. Honrar a nuestro mayores es la mejor manera de aprender del pasado para proyectar un futuro de paz y armonía. Muy bien, Adriana.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde España.
Bonito homenaje a tu abuela algo que en parte envidio ya que la única que conocí murió siendo un niño por lo que no tengo recuerdos.
ResponderEliminarSaludos.
Precioso y tierno homenaje a tu abuela. Yo tube la suerte de convivir con mis dos abuelas y tambien las recuerdo con mucho cariño y admiración por el buen ejemplo que me dejaron.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuánto pueden las fragancias, para que no se pierda la memoria de las querencias, como esta de la abuela, que la pone en la añoranza el olor del orégano. Qué bien versas. Un abrazo desde mi cubil colombiano. Carlos
ResponderEliminarCuanto cariño y mimo para la abuela única...
ResponderEliminarSaludos
Matilde te ha llenado de ella y su dulzura
ResponderEliminarpaz
Isaac
Hola Adriana,
ResponderEliminarTodo lo que està en el pasado nos llevó al presente, el futuro es una incognita...
Precioso el poema dedicado a tu abuela, una generación de mujeres sabias y fuertes que podían con todo, si vieran como nos quejamos a menudo a pesar de las comodidades, no lo entenderian!
Besitos, amiga.
¡Qué bonitos versos! Me han emocionado porque me han traído el recuerdo de mi madre y sus manos, siempre trabajando para mí.
ResponderEliminarUn abrazo
Un poema conmovedor, los aromas quizás sean los recuerdos más evocadores de nuestra infancia junto a la figura de una abuela.
ResponderEliminarUn abrazo lleno de esperanza en este noviembre.
Adriana, você é uma das mais
ResponderEliminarcompetentes poetas que conheço.
Parabéns pelos versos.
Um beijo e bom dia.
Hermoso recuerdo de tu abuela! mi abuela paterna, Ana, fue una amorosa compañera de camino. La disfruté 21 años y hoy con mis 55 no dejo de recordar sus deliciosos ñoquis "naranjas" y su manera de llamarme cuando charlábamos: "nena" me decía con cariño. De avanzada mi abu, podía hablar con ella cualquier tema. Siempre estará en mi corazón...Gracias Adri, abriste el baúl de los recuerdos!
ResponderEliminarFabulous blog
ResponderEliminarPlease read my post
ResponderEliminarAdriana, vim reler-te e desejar una buena semana para ti.
ResponderEliminarUn abrazo!
A.S.
Con tus letras llega hasta mí el tacto de las manos queridas por ti. Su aroma de orégano y de ese mate "lavado" que recuerdo de cuando estuve en Argentina y Uruguay. Un beso, Adriana.
ResponderEliminarMuy evocador este poema, esos aromas de la infancia son insuperables. Un homenaje bien merecido.
ResponderEliminarPor fin solucionado el problema de mi pc, era la tarjeta gráfica.
Por fin con vosotros.
Un abrazo Afriana
Gracias Adriana por acordarte de mi.Estoy bien, pero de momento tengo poco tiempo para ponerme con calma en el ordenador y escribir los poemas que tanto me gustan. En cuanto pueda volvere.
ResponderEliminarEs muy hermoso el poema que le dedicas a tu querida abuela.Yo no conoci a mis abuelas,pero ahora si soy abuela de siete nietos que espero me recuerden con tanto cariño como tu recuerdas a la tuya.
Un abrazo y todo mi cariño
Recuerdo los empachos donde te tiran el cuerito hace crak y te sientes enseguida bien
ResponderEliminarMe Has Encantado
Una belleza de poema
ResponderEliminarpara tu abuela y que
serviría para la mía
que emanaba una gran paz
y una gran sabiduría.
También echo en falta
a mi abuela Consuelo.
Un gran abrazo.
Querida Adriana has traído a mi memoria hermosos recuerdos con mi abuela, lamentablemente solo la disfruté unos poquitos años pero los suficientes como para que quedaran en mi memoria para siempre. Solo la tuve a ella ya que mi otra abuela había partido antes que naciera.
ResponderEliminarPrecioso post me han encantado tus versos, tan dulces, tan lindos como ese aroma a orégano fresco que perfumaban las manos de Matilde. Bello.
Abrazos amiga mía y como siempre lo mejor para vos.
Mi abuela es un hada
Mi abuela Mariana,
tiene una cana,
cana canariera.
Mi abuela Mariana,
me cuenta los cuentos
siempre a su manera.
Yo la quiero mucho,
yo la quiero tanto...
Me ducha, me peina
y me lleva al campo.
Me enseña canciones,
me ayuda a estudiar,
dice poesías,
solemos jugar.
Luego por la noche
mi abuela me vela,
un cuento me cuenta
y cuando me duermo,
me apaga la vela,
Mariana mi abuela.
Mi abuela Mariana,
de paja el sombrero,
el traje de pana,
mi abuela Mariana
no parece abuela,
me parece un hada.
Gloria Fuertes
Hay abuelas a las que se extrañará siempre. Yo tengo una.
ResponderEliminarBesos.
Precioso poema dedicado a tan linda memoria.
ResponderEliminarAbrazos y bendiciones para ti y los tuyos.
Qu Ed bonitos versos, sentir que emocionan. Besos
ResponderEliminarPrecioso homenaje a tu abuela, que allí donde esté se sentirá orgullosa de ti.
ResponderEliminarEn mi casa nunca faltan plantas aromáticas, como el orégano, el tomillo, el laurel, etc. porque son muy utilizadas en nuestra comida regional.
Un fuerte abrazo, Adriana.
Muy hermoso homenaje el que le haces a tu abuela Adriana.
ResponderEliminarBesos.
bendigo el momento hermos de tus letras
ResponderEliminarte mando jazmines blancos
Bela homenagem!
ResponderEliminarOs nossos avós, deixam sempre uma saudade muito especial!
Te deixo un abrazo!
Es un bello poema, y un emotivo homenaje el que has hecho a tu abuela. Ella seguro que esta contigo en cada paso del camino.
ResponderEliminarUn cálido abrazo.
Me encanto Adriana, una abuela es parte de tu historia, con brazos cariñosos, donde todos caben, abrazo feliz para ti!
ResponderEliminarMi mujer y yo no tuvimos abuela, mis tres hijos tampoco. Quiero decir que no la conocimos. De algún modo, creo que la echamos de menos sin haberla visto nunca.
ResponderEliminarHasta pronto.
Feliz Navidad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.