...Sobre una torre había una mujer, de túnica blanca, peinándose la cabellera, que le llegaba a los pies, el peine desprendía sueños, con todos sus personajes: los sueños salían del pelo y se iban al aire.
Eduardo Galeano
Otra vez caminando por mis sueños
entre hilos, agujas y botones de nácar
caramelos 1/2 Hora, papel barrilete
puntillas, jabones, cuadernos Rivadavia
bicarbonato, aspirinas, y Corin Tellado
(zapatos Bandolero únicamente por encargo)
tabaco, alpargatas y espirales Caracol
que con suerte lograban encenderse
-después de intentos fallidos varios-
no solo ahuyentando perversos mosquitos
sino el mal de ojo y otros tantos males
que tuvieran la osadía de atacarnos
No era el Gran Bazar de Estambul
apenas una modesta tienda de barrio
donde los vecinos de manera amable
te llamaban "la turca" porque hablabas raro
un día sin querer descubrí tu pasaporte
escrito con tinta borroneada por los años
casi ilegible el lugar de nacimiento
quería saber y preguntaba, vos respondías:
...mi pueblo está situado en un país lejano
donde el viento sopla con su boca de arena
hay un río largo, ovejas, y palmeras datileras
un valle muy verde, casitas muy blancas
que humean aromas de pan y canela
por sus incansables chimeneas pardas
ojalá algún día puedas visitarlo...
volaba entonces mi imaginación de niña
era para mi como un cuento de hadas
aunque su final me resultaba extraño
porque con un largo suspiro repetías
vaya a saber Dios, si todavía
figuramos en el mapa.
*
A. Alba
Imagen: Catrin W. Stein
